Ángela Gurría Davó fue una escultora que con su obra ha influido en artistas y creadores de todo el mundo. Su trabajo ha sido reconocido a nivel nacional e internacional. Se erige como un punto de referencia esencial en la escultura mexicana del siglo XX. Gurría, una pionera en la exploración de nuevas formas de expresión escultórica, logró crear un lenguaje visual que dialoga con la historia y la contemporaneidad. Así, dejó un legado perdurable que sigue inspirando a artistas y espectadores por igual.
Ángela Gurría, una escultora cuya trayectoria se caracteriza por la búsqueda constante de aprendizaje, comenzó su formación artística de manera autodidacta en la Ciudad de México. Su talento y dedicación la llevaron a convertirse en discípula de figuras clave del arte mexicano, como Germán Cueto, Mario Zamora y Abraham González. Ellos le transmitieron su pasión por la escultura. Consciente de la importancia de la formación académica, Gurría continuó sus estudios de artes plásticas en instituciones de Inglaterra, Francia, Italia, Estados Unidos y Grecia. Allí consolidó su dominio de la técnica y su visión artística.
Ángela Gurría, una escultora que exploró las infinitas posibilidades de la forma, creó obras que reflejan su profundo respeto por la naturaleza y sus formas orgánicas. Su lenguaje escultórico, una fusión de misticismo, geometrismo y legado prehispánico, se caracteriza por su originalidad y su capacidad para evocar emociones y significados profundos. Gurría, una alquimista de la imagen, logró transformar la materia en un sueño lúcido. En sus obras, la naturaleza y la cultura dialogan en una sinfonía visual única.
Entre las esculturas que reflejan su inspiración destacan aquellas donde representa la vida-muerte, mariposa-calavera. En ellas, utiliza altos y bajos relieves para evidenciar la luz y la sombra. Cabe señalar que la mayoría de sus obras son monumentales, una característica que se convierte en su sello distintivo. Cuenta con más de treinta obras instaladas a lo largo del país. De estas, cabe destacar el proyecto Señal, realizado con motivo de los Juegos Olímpicos de 1968. Esta escultura simboliza la hermandad de los pueblos y formó parte del famoso corredor “Ruta de la Amistad”.
Otras de sus obras importantes son: Río Papaloapan (1970) en el Museo de Arte Moderno. También Juguetes populares (1971-1973), catorce esculturas-juguete para la integración en arquitectura en Paseo Tollocan, Toluca, Estado de México. México, monumento al mestizaje (1973-1974) en Tijuana, B.C; y El corazón mágico de Cutzamala, trabajo de integración al paisaje, en Cutzamala, Estado de México (1985).
Ángela Gurría demostró su valía al convertirse en la primera mujer miembro de la Academia de las Artes en 1973. Este hito marcó un antes y un después en la escena artística mexicana. Su constancia y dedicación fueron recompensadas con numerosos reconocimientos por sus esculturas. Esto consolidó su posición como una de las artistas más influyentes del siglo XX. Gurría, una visionaria del arte, trascendió las barreras de género, dejando un legado que resuena con fuerza en el presente.
Fue galardonada con Mención Honorífica en la Exposición de Escultura Mexicana Contemporánea (1960), Primera Bienal Mexicana de Escultura (1962) y Segunda Bienal Mexicana de Escultura (1964). Obtuvo el Primer Premio de Escultura Integrada a la Arquitectura en la Tercer Bienal Mexicana de Escultura (1967). Acreedora a diversos reconocimientos por su labor artística, entre los que se destaca el otorgado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, en el Palacio de Bellas Artes en 2010. Además, en 1973 fue designada como la primera artista mujer inscrita en la Academia de las Artes.
Ángela Gurría fue galardonada con el Premio Nacional de Ciencias y Artes en 2013. Este premio es un testimonio de su excelencia en el ámbito de las bellas artes. Su talento no se limitó a la escultura, ya que también compuso la conmovedora canción «El día que me dijiste», interpretada por Chavela Vargas. Tras su fallecimiento el 17 de febrero de 2023, a los 97 años, el legado de Gurría se mantiene vigente. Es recordada y homenajeada con retrospectivas que celebran su vida y obra.
