La diversificación de religiones y los apegos emocionales han creado una relación negativa entre el ciclo de vida y muerte. Por ello, cada vez que la muerte se aproxima a nosotros, el pesar y el dolor son difíciles de llevar, más si se trata de esos grandes compañeros de vida que lo son los animales. La pregunta es latente: ¿cómo despedir a los animales de compañía? No es que exista una fórmula correcta, pero sí ideas que pueden ayudarte a hacer su partida llevadera.
Puede que la enfermedad, los años o algún efecto degenerativo esté mermando la salud de tus compañeros animales y lo más digno y ético sea optar por ayudarles a morir a través de la eutanasia. Despedir a un ser vivo jamás será fácil pero siempre se debe apostar por el bienestar y comodidad de aquellos a quienes se les dificulta expresar oralmente un dolor o un pesar físico y jamás, poner por delante nuestro propio interés y para ello, te traemos estas recomendaciones para que sea más liviano.
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Tiempo de calidad
Una vez que el profesional de la salud animal determine que la eutanasia es lo mejor para tu animal, aprovecha todo el tiempo posible con él. Sin duda, ellos disfrutan de una buena tarde de caricias, mimos o palabras de cariño; trata de que los últimos días que compartan, tu tristeza no te aleje de él. La situación puede ser más difícil si en en el ensimismamiento, el animal se siente abandonado o culpable.
Programar
La muerte asistida tiene la ventaja de ser programable. Pero no pierdas de vista que no puedes aplazar, por dolor propio, un evento necesario por humanidad para con tus animales de compañía. Despedir a los animales de compañía jamás será sencillo, pero mejorar la condiciones tanto físicas como emocionales para el momento en que ellos abandonen el espacio terrenal es un acto de amor sincero de nuestra parte.
Conservación de recuerdos
Hoy día, la tecnología nos hace más asequible la toma e impresión de fotografías. Antes de llevar a tu amigo peludo a ser asistido en su muerte, toma una serie de fotografías con él que hagan mantener latente su recuerdo. También puedes colocar su patita en arcilla para conservar el molde la misma. Lo importante es que sea un recuerdo lindo acerca del tiempo que pasaron juntos.
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Concientizar
Ten siempre presente que por muy doloroso que resulte, es una decisión necesaria y un acto de amor profundo por el ser que compartió su existencia contigo. Evitarle días llenos de sufrimiento es el acto de agradecimiento más grande a su compañía y cariño que nos brindaron mientras estuvieron con nosotros.
Planificar
Tener presente y cubiertos los gastos funerarios respecto al tratamiento de sus restos, ayuda a reducir la pena que nos embarga. Existen lugares donde además de la muerte asistida, se hacen cargo del cuerpo para incineración o tienen arreglos con espacios donde puedes enterrar a tu animalito. No olvides este detalle ya que está prohibido enterrar restos animales en vía pública y aunque el parque te traiga recuerdos, no es el lugar más idóneo para preservarlo.
Recordar
Un animal de compañía siempre tendrá todo nuestro amor y agradecimiento. Una vez que hayas concluido el proceso, trata de transitar por el duelo sin ataduras ni presiones. No hay que permitir que se haga menos la emoción por tratarse de un animal, puesto que estos, pasan a ser parte de la familia y su perdida representa un dolor similar a la de cualquier miembro. No minimices tus emociones y busca ayuda profesional en caso de que lo consideres necesario.