Nació en Alemania. Estudió en la escuela del Bauhaus. La segunda guerra mundial la orilló a huir a Argentina para escapar de los Nazis. Es justo en Sudamérica donde logra explotar su talento al máximo. Estamos hablando de Grete Stern, una de las fotógrafas y artistas plásticas más importantes de su generación.
Primeros años de Grete Stern
Resulta interesante como el destino puede ser tan aleatorio. Durante sus estudios en Bauhaus, Grete Stern conoció a Horacio Coppola. Con él huiría en 1936 de Alemania luego de que Hitler iniciara la persecución tras ganar las elecciones en 1933. Tras una estancia en Londres, la pareja se mudó a Argentina, país de origen de Horacio. Es ahí donde pudo explorar al máximo su talento artístico, llegando así a complementarse al máximo y crear sinergia con el río de la plata.
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Estilo
Grete Stern estuvo muy influenciada por el surrealismo. A la hora de fotografiar buscaba estas imágenes fuera de lo común, retratos bizarros paisajes deformes. Sin embargo, lo más aplaudido de su obra son sus fotomontajes. Es ahí donde realmente pudo explorar al máximo su visión artística.
La máxima obra de Grete Stern lleva por nombre Sueños. Se trata de una serie de 150 fotomontajes los cuales sirvieron para ilustrar una columna en la revista femenina Idilio. Combinando humor y surrealismo, Stern logra transmitir potentes mensajes que denuncian la situación femenina en la sociedad de la época.
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Además de Argentina, su obra puede ser vista en numerosos museos alrededor del mundo. Uno de ellos es el Reina Sofía de Madrid, España. En este museo se pueden encontrar algunas de sus obras ya que forman parte de un par de colecciones que se exhiben permanentemente en el museo.
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