Conoce más sobre las mujeres de la Bauhaus, aquellas artistas que revolucionaron el mundo del arte, la arquitectura y el diseño, pero durante muchos años permanecieron en las sombras. Recientemente la máxima escuela alemana resurge y han anunciado un inminente regreso con la iniciación de una nueva institución. Y con ello las artistas que fueron importantes pilares de la historia para la Bauhaus también vuelven. Su voz y la huella imborrable que dejaron para el arte resuena fuerte y ahora el mundo va a conocerlas.
Posiblemente no se ha escuchado mucho sobre las fotógrafas, diseñadoras y tejedoras. Las investigaciones y revisiones del material recolectado de la escuela revelaron archivos audiovisuales. Donde perfilan algunas de las artistas más emocionantes de la vanguardia de la década de 1920, fueron cerca de 462 mujeres que también enseñaron, estudiaron y crearon un innovador cuerpo de trabajo en la misma escuela.
GUNTA STÖLZL: LA PRIMERA MAESTRA EN LA BAUHAUS Y SUS TEJEDORAS
Algunas de las mujeres más importantes en la historia de la Bauhaus
- Ani Albers
- Lilly Reich
- Marianne Brandt
- Gunta Stölzl
- Alma Siedhoff-Buscher
UNA NUEVA BAUHAUS ESTÁ POR LLEGAR A EUROPA Y AL MUNDO
Conflictos con las mujeres
A lo largo de todos estos años, a las artistas se les ocultó tras el apellido de sus maridos, fueron relegadas al diseño textil (donde por cierto destacaron gracias a su talento) y sencillamente las ignoró la misma Bauhaus. Pues resulta que la escuela tenía una relación llena de conflictos hacia las mujeres. La escuela de arte fue una plataforma para muchos artistas revolucionarios de la época, por lo que sembró un sueño en las mujeres ya que se comenzaron a aceptar chicas en los colegios. Todo iba muy bien, en el centro educativo más progresista, pero con el tiempo, se enfrentaron a una actitud ambigua por parte del profesorado y directores.
Algunos de sus discursos engañosos decían así: «¿Estás buscando la verdadera igualdad como mujer estudiante?» y es que la escuela fue muy convincente. Ya que el número de matrículas femeninas fue casi igual al de masculinas, 51 mujeres frente a 61 hombres, algo que no sucedía a menudo.
EL BALLET TRIÁDICO DE LA BAUHAUS, UNA CREACIÓN DE OSKAR SCHELMMER
El final del sueño
La «igualdad» no duró mucho, pues rápidamente los profesores al ver un crecimiento de las mujeres en el arte afirmaban que se les había salido de las manos. El mismo fundador de la Bauhaus, Walter Gropius alegaba que ya eran muchas estudiantes. Por lo que la solución fue relegarlas únicamente a los talleres textiles. Las artistas no volvieron a pisar un taller de metal o dedicado a la carpintería.
«Es necesaria una estricta selección, sobre todo en cuanto al número demasiado elevado del sexo femenino […]. No debemos hacer experimentos innecesarios».
Gropius
Afortunadamente, el tiempo sacó a flote la verdad. Museos, historiadores y más colaboradores fueron recuperando poco a poco las piezas y obras de cada artista; para así darles el reconocimiento que se merece cada mujer. Pues incluso la Bauhaus se atribuyó muchas de las obras de arte quitándoles el crédito.