Hace poco se dio a conocer que una persona llamó a los servicios de emergencia debido a que una mujer se había desmayado en una galería de arte en Londres, Inglaterra. Sin embargo, la sorpresa se dio cuando se dieron cuenta que no se trataba de una mujer, sino de una obra de arte hiper realista. Es así como una más se suma a la lista de obras de arte que fueron confundidas con objetos cotidianos.
Estos hechos ocurren seguido alrededor del arte contemporáneo. Su naturaleza invita a la confusión. Al no tratarse de obras de arte convencionales y alejarse de los materiales típicos como el lienzo y la pintura, puede llevar a una confusión, tanto del espectador como de las personas encargadas de exhibirlo.
Te dejamos aquí algunos ejemplos de obras de arte que fueron confundidas. Algunas de ellas causaron conmoción. Por otro lado, algunas sacaron risas al mundo.
Kristina – Mark Jenkins
Empecemos por la obra que mencionamos en la introducción. Se trata de Kristina de Mark Jenkins. En esta obra el autor buscaba a la hermana de un ex agente de arte que había colapsado de manera similar. Siendo una de las tantas obras de arte que busca denunciar algún problema social.
Sin embargo, no todos captaron el mensaje inicial de la obra. Una mujer, al verla, pensó que se trataba de una persona real que se había desmayado en una mesa. Esto provocó que se llamara a los servicios de emergencia. Lo curioso es que esto se repitió en una tienda de decoración en donde se exhibió Kristina también, por lo que podemos pensar que se trata más que nada de una reacción natural al tratarse de una obra bastante realista.
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¿Dónde vamos a bailar esta noche? – Sara Goldschmied y Eleonora Chiari
Esta obra se convirtió en noticia rápidamente. Su intención parecía clara, denunciar el consumismo al que se vio sometida la sociedad en los años 80. Para esto hicieron una representación de lo que sería el día siguiente de una fiesta de año nuevo, llena de champagne, basura y otras botellas y sustancias.
El problema fue que una persona del museo en el que se exhibió, pensó que se trataba de basura real que habían dejado tras la inauguración de la exposición. Por este motivo, procedió a levantarla y tirar todos los elementos a la basura.
Por fortuna las autoras Sara Goldschmied y Eleonora Chiari, luego de pasar el shock inicial, no hicieron más que reír y pensar que habían logrado crear una obra de arte tan realista que su mensaje pudo funcionar.
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Gafas confundidas con obra de arte
Sin embargo, hay que decir que no siempre pasa que una obra de arte es confundida con objetos cotidianos. Existe también el caso en el que un objeto cotidiano es confundido con una obra de arte.
Esto fue lo que pasó en 2016 en un museo en San Francisco. Unos jóvenes visitantes decidieron visitar el museo pero al darse cuenta que había obras que para nada les parecían arte decidieron hacer un experimento: colocar unas gafas en el suelo y esperaron para ver qué pasaba.
No tuvo que transcurrir mucho tiempo para que algunos visitantes del museo se detuvieran a contemplar la «obra» e incluso la fotografiaran. Sin duda una muestra de que no hay nada tan subjetivo como el arte.
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