El pan de muerto es uno de los alimentos tradicionales durante la celebración de Día de Muertos en México. Este símbolo en la gastronomía mexicana se consume cada año, entre el mes de octubre e inicios de noviembre. Los habitantes a lo largo de todo el país esperan pacientemente a que las almas de sus seres queridos vuelvan y los acompañan degustando un sabroso pan.
El más popular de los panes es el azucarado o cubierto de ajonjolí, sin embargo dependiendo la región en la República Mexicana varía su forma y sabores.
Tipos de pan de muerto por región
En Aguascalientes, Jalisco, Baja California, Colima, Coahuila, Nayarit y Chihuahua. Se encuentra el pan de muerto tradicional que es redondo, ovalado individual y familiar desde 60 gramos hasta 2 kilos.
Ciudad de México y Estado de México
«Pan de muerto» clásico, redondo, adornado con su canilla de la misma masa, espolvoreado con azúcar blanca y en otras poblaciones con azúcar rosa. Que recuerda el uso ceremonial del color rojo en la época prehispánica, para representar una tumba con un cráneo y varias canillas entrecruzadas que simulan los huesos, sustituyó al Zompantli.
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Ciudad de México (Mixquic)
Se realizan las «despeinadas», rosquitas de azúcar rosas, el típico pan de muerto con azúcar, ajonjolí y granillo con una cruz en el centro. Los panes en forma de mariposa, ya que se creía que, al morir, las niñas se convertían en mariposas.
Estado de México
Pan antropomorfo hecho de yema de huevo, de esta misma masa se realizan los conejos, los borregos y las finas, que aparte lleva canela. Bordes con la superficie blanca, salpicada con manchas rojas que representan los sacrificios prehispánicos. En Texcoco se elabora el pan conejo de manteca, nuez, guayaba y canela. Así como encaladillas y calaveras de masa de galleta glaseadas con puntos de azúcar rosa.
Morelos
Pan antropomorfo, adornado con la misma masa.
Puebla
Se hacen los «Golletes» (roscas adornadas con colores) y el llamado «sequillo» que es seco con un color amarillo yema de huevo.
Pan de muerto en el Bajío
Guanajuato
En Acámbaro se elaboran conejos, mulas, borregos y pan de canela. «Almas», que es un pan en forma de figura humana. Los que representan a los adultos son glaseados blancos y al centro un punto de azúcar rosa, y los niños son todos blancos.
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Hidalgo
Es uno de los estados con más variedad de pan de muerto. Aquí se elaboran por ejemplo, las moriscas de harina, canela, huevo y pulque. Tradicionales en la región de Tula son las gorditas de maíz, roscas, corazones similares al corazón humano, barnizados con azúcar blanca y rosa. También se preparan las famosas «cuelgas», las cruces adornadas con azúcar de colores y bordadas con la misma masa. Otro ejemplo es en el Mezquital, donde el pan de muerto es una figura en forma de cuerpo humano completo o cabecitas, manos, huesos y hasta pezuñas de animales. Así como las «cajitas» que corresponden a los féretros usados para el entierro. Y la «Rosca de la vida», adornada con huesos o canillas de manteca que son la representación de huesos humanos.
Michoacán
«Pan de ofrenda» elaborado con harina de trigo, levadura de soya, azúcar y sal. Entre las formas más comunes destacan: vírgenes, conejos, burros, campesinos, sombreros, flores y calaveras pintadas con los nombres de los difuntos. «El Pan de hule» es parecido al pan de ofrenda, moreno, redondo, brilloso y lleva en la superficie dedicatoria al esposo, al novio, o la suegra. Y las tradicionales «corundas», pan indígena que está hecho con masa de maíz y un punto de salsa de tomate con chile de árbol. Envuelto con hojas de milpa verde, lo cual le da el color y sabor especial.
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Ingredientes tradicionales en las masas
Guerrero
En las ofrendas (huentli) se colocan panes llamados camarones, tortas y amargosas, también hay muñecos y pan de figura.
Oaxaca
«Regañadas», panes de pasta hojaldrada que se utilizan en las ofrendas y que representan las «animas» de personas o animales. En Tlacolula, elaboran conejos, payasos, pan de cazuela y pan de pulque. Así como el «Pan de yuca» que es originario de Mayultiaguis.
Origen del pan de muerto
De acuerdo al Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, el pan de muerto viene del papalotlaxcalli. Una tortilla (tlaxcalli) con forma de mariposa (papalotl) que se ofrendaba a Cihuapipiltin y a las mujeres que morían en el parto. Sin embargo también existe un mito muy popular, el cual explica que el pan de muerto mexicano se remonta a la costumbre prehispánica de los sacrificios humanos: “Una doncella era ofrecida a los dioses, y depositaban en una olla con amaranto el corazón aún latiendo, lo tenían que morder en símbolo de agradecimiento”. Cuenta la leyenda que los conquistadores habrían sustituido el órgano por un pan.
El significado “ritual” del pan de muerto, es una alegoría de la persona difunta: la forma circular simboliza el ciclo de la vida y la muerte; la bolita de masa en el centro es el cráneo, así como la decoración que representa los huesos, dispuestas simbólicamente en forma de cruz.