La naturaleza es una fiesta y un festín en sí misma. Es digna de ser explorada y amada, bendecida por la palabra y por las bondades que brinda. La celebración es también algo que debe encontrar un motivo en y para la naturaleza. Por ello, el 20 de septiembre, se consolidó como el «Día Internacional de los hongos y la psilocibina».
El 920 es considerado como un día educativo por la comunidad consumidora. Surgió en 2015 cuando Nicholas Reville fundó la coalición 920, con el objetivo de crear una gran comunidad conciente, que fomente el diálogo constructivo y propositivo sobre los efectos positivos de la psilocibina. De ahí que el Día Internacional de los hongos sea una fiesta de ideas, de logros y de lucha.
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La defensa de la naturaleza como algo que no se debe prohibir
El 920 es considerado un día para la reflexión del vital papel de los hongos en las sociedades antiguas y la contemporánea. Las setas, vistas como una maravillosa manifestación de la naturaleza, estimulan el pensamiento humano, al grado de hacer del Día Internacional de los hongos, una jornada enfocada en la lucha por la despenalización y concientización del importante papel de los hongos psicodélicos en la vida.
Se hace hincapié en las reformas políticas, en los estudios científicos y las aplicaciones médicas de las extraordinarias propiedades de tan bellas formas de vida. Reville consideró que los organismos pertenecientes al reino «fungi», merecían su propia celebración cultural. La influencia en la política es algo que caracteriza a la fiesta por el Día Internacional de los hongos.
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Celebración más allá de lo psicoactivo
La fecha fue elegida por la llegada del otoño, época del año en que las zetas son más abundantes en su ambiente natural. La cercanía del Día Internacional de los hongos con el equinoccio otoñal, le otorga el poder de equilibrar. Son días en los que el día y la noche tienen la misma duración. Como toda buena celebración, es algo equilibrado, bien balanceado. Por un lado la posibilidad de consumir, y por el otro, la posibilidad de concientizarse, y claro, concientizar.
Los eventos conmemorativos incluyen conferencias, talleres y charlas. Aunque para realmente aprovechar y hacer de la existencia de las setas, toda una de celebración, especialmente si se trata del Día Internacional de los hongos. No viene mal el asistir a funciones de cine psicodélico, o incluso adaptar la casa para una breve función.
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Variedad de usos y perspectivas de los hongos
Acampar y disfrutar de algo natural, en medio de la misma naturaleza, o incluso aprender a cultivar tus propios hongos, son actividades que comulgan con el lema psicodélico moderno: «Encuentra a los otros». Por ello, el Día Internacional de los hongos la búsqueda de hongos, personas y experiencias.
La celebración de la naturaleza permite conocer más a fondo. La fiesta en torno a la psilocibina es tertulia sobre la variedad de usos y la diversidad de perspectivas sobre las setas, que derivan en una sola encomienda: la despenalización de los hongos, y de su consumo.
Si bien, se ha logrado avanzar en la búsqueda de un uso con fines terapéuticos, lo ideal es no penalizar el consumo en cualquiera de sus manifestaciones. Consumir lo natural irremediablemente te acerca con la naturaleza. Celebremos entonces el Día Internacional de los hongos, respetándolos, conociéndolos, consumiéndolos y estudiándolos ¡Los hongos son vida!
Stephanye Reyes
Periodista en deformación. Humana por imposición, bruja por elección. Ojos defectuosos pero talentosos. Hago fotografía de todo lo que mis miopes ojos ven: Ig:bruja_amapola
