Los performances más ridículos del arte contemporáneo
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Los performances más ridículos del arte contemporáneo

El arte contemporáneo trajó consigo además de ciertas burlas y críticas, nueva etiquetas para encasillarlo. Una de ella es el «Hamparte» que no es otra cosa más que un concepto para denominar el arte que no se considera arte. El youtuber Antonio García Villarán fue quien acuñó este término y abrió el debate en redes sociales. Entendemos así, que el hamparte es todo aquello que puede ser reproducido por personas sin talento pero que se da a conocer como arte. Es importante conocer la definición ya que con ello, se podría comprender los performances más ridículos del arte contemporáneo.

El arte del performance ha sido una herramienta de denuncia, visibilización y hasta una muestra de activismo. Sin embargo, existen otras piezas que se han categorizado como los performances más ridículos del arte contemporáneo. Quizá de inicio, la intención es buena, pero el desarrollo de la idea ha brindado la popularidad que buscaban bajo la categoría de lo absurdo. Aunque para muchos artistas, esto cumple con el cometido disruptivo del arte y la necesidad de despertar emociones.

Los performances más ridículos del arte contemporáneo no son una selección al azar. Son una muestra de que evidentemente el arte se concibe diferente en cada cabeza. Además, para algunas personas no resultan ridículos ni extremos, sino el arte incomprendido en una sociedad consumida por estereotipos. Aquí te traemos un top de los más extraños o «curiosos» de lo último años.

El intento de revivir el arte…reviviendo a Van Gogh

El artista y activista bielorruso, Alexéi Kuzmich, hizo una extraña intervención en el cementerio francés donde yacen los restos de Vincent Van Gogh. Con una pala y un despertador en mano, el performancero se presentó vestido de blanco pretendiendo «revivir el arte» desenterrando al pintor. Los visitantes que se encontraban en el cementerio, escuchaban con atención mientras declamaba en inglés que le resultaba insoportable vivir en un mundo donde ya no hay pintores, por lo que «regresaría» a la vida al pintor para que «renaciera el arte plástico en el presente».

Con el despertador en mano, el artista gritaba al mismo tiempo que cavaba la tumba de Van Gogh: “Artista, ¡es hora de levantarse! Artista, ¡despiértate!”. Y aunque algunas personas intentaron frenarlo, logró cavar un hoyo sin llegar hasta el ataúd. Sin embargo, equipo de seguridad del cementerio lo detuvo y no se conoce si hubo repercusiones legales hasta el momento.

Vito Acconci: Poeta del performance y el arte corporal

Tejiendo desde el fondo de su ser

El arte feminista ha sido duramente criticado desde perspectivas misoginas y patriarcales. Sin embargo, dentro de los performances más ridículos del arte contemporáneo, se encuentra uno muy particular. La artista feminista Casey Jenkins, una autoproclamada «craftivista», llamó la atención del mundo del arte pop en 2013. Ella, optó por tejer a partir de una bola de lana encajada dentro de su vagina.

«Paso 28 días tejiendo con lana que he insertado en mi vagina», afirmó la artista de Melbourne en un vídeo del acto. «Todos los días tomo una nueva madeja de lana que ha sido enrollada de manera que se deshaga desde el centro y la meto dentro de mí… y luego saco el hilo y tejo».

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Penetraciones dolorosas en el arte

En 2007, el artista Adrian Parsons, radicado en Washington, se circuncidó en el escenario. Frente a un público, procedió a tomar su pene en la mano y con una navaja suiza sin filo cortar el prepucio. Posteriormente, Parson procedió a introducir su miembro cortado en un «agujero de gloria» perforado en la pared. El público presente, le escuchó lamentarse de que el agujero era demasiado pequeño. Cuando se le preguntó por qué hizo esta actuación, Parson dijo: «Estaba tratando de penetrar la galería y el público. Quería ser una metralla orgánica». Por lo cual, entra dentro del top de performances más ridículos del arte contemporáneo.

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El placer de la denuncia

En 2008, un grupo de entre diez y quince jóvenes entró al Museo Biológico de Moscú. En una de las salas, se quitaron la ropa y montaron una orgía. Protestan por lo que consideran una «pornográfica» cesión de la jefatura de Estado por parte de Vladímir Putin a Dmitri Medvédev . La acción, cuyas imágenes fueron más tarde ampliamente difundidas en Internet, tuvo lugar 48 horas antes de las elecciones presidenciales. Y en ella participó una mujer embarazada de solo 18 años, que daría a luz pocos días después: Nadezha Tolokónnikov, una de las tres integrantes del grupo Pussy Riot.

Rocco Ritchie, hijo de Madonna, cerró una exposición fotográfica en Milán con una performance

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Una autoerotización bajo el suelo

En 1972, Vito Acconci sorprendió al público de la Galería Sonnabend de Nueva York cuando se metió debajo de una rampa en el refugio del arte. Una vez debajo del espacio, procedió a masturbarse, utilizando el sonido de los visitantes que caminaban sobre él para despertar sus «fantasías sexuales». También usó un micrófono para proyectar su monólogo en curso -básicamente, una serie de pensamientos muy sucios- a toda la sala con la finalidad proyectar el placer sexual como arte.

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Stephanye Reyes

Periodista en deformación. Humana por imposición, bruja por elección. Ojos defectuosos pero talentosos. Hago fotografía de todo lo que mis miopes ojos ven: Ig:bruja_amapola