Eduardo Humberto del Río García, Rius, ha muerto a los 83 años como uno de los referentes artísticos de la caricatura, la historieta y los monos de los recientes 60 años.
Rius fue una figura tutelar de generaciones enteras de comiqueros, moneros y lectores, que en sus libros encontramos apuntes formativos sobre la mar de temas socio-políticos y culturales. Rius era el humor punzante y necesario de un país en revuelta permanente. De formación autodidacta, crítico y auto crítico, nació en 1934 en Zamora, Michoacán, y falleció el 8 de agosto en Tepoztlán, Morelos.
En Mis confusiones: Memorias desmemoriadas (2014), Ruis rememora sus inicios como dibujante a mediados de la década de los cincuenta en la revista Ja-Já, luego de ser “descubierto” garabateando por Ernesto Patiño, director de la publicación.
Luego vendría La gallina, Marca Diablo, La Garrapata… la publicación en todo tipo de medios de carácter nacional, incluidas sus creaciones más populares: Los Supermachos y Los Agachados.
Ateo, “marxista masoquista”, Rius se mantuvo en las bibliotecas y el gusto popular con la edición de sus libros didácticos: La panza es primero (1973), Manual del perfecto ateo (1981), El amor en los tiempos del SIDA, La Biblia, esa linda tontería (1996), entre muchos otros.
Sobre esta producción, dice Bernardo Fernández, BEF, en 80 Aniversarius:
“Es lugar común señalar que Rius cumplió en muchas ocasiones las funciones de la Secretaria de Educación Pública, su exitosa incursión en la historieta didáctica produjo decenas de libros de divulgación que se convirtieron en las primeras lecturas políticas (o no), de, literalmente, millones de mexicanos”.
MIRA LOS CÓMICS ILUSTRADOS POR CANCIONES DE THE CURE
Desde otra óptica, el crítico literario Luis Bugarini, señala: “Sin duda los libros de Rius han sido parte del consumo habitual del mexicano que lee, pero la falta de un proyecto hacia el cual dirigirse (me refiero a la ruina de los países socialistas), lo desplazaron para darle un espacio como intérprete humorístico desde la izquierda para los nuevos tiempos, en lugar del timonel moral que ejerció por décadas”.
Queda la estela de Rius, su propia obra, la influencia que seguirá marcando en generaciones venideras, artistas, lectores. Mientras tanto va un pequeño homenaje de algunos de los moneros que reconocen en él a un maestro: BEF, Frik, Ricardo Camacho y Daniel Camacho.